Descripción
Las variedades de este pack se complementan mutuamente, aportando resultados estupendos tanto en su cultivo como en su consumo.
Estas variedades han sido escogidas especialmente por sus calidades individuales y cada pack contiene dos semillas de cada una; el
comienzo perfecto para el cultivador y la cultivadora que busquen un revoltijo. Cada planta autofloreciente alcanza entre 70cm. y 1m. de
altura cuando se cultiva en interiores (y posiblemente un poco más en exteriores); y necesita entre 60 y 70 días desde la semilla para ser
cosechada.
Para empezar, tenemos una Auto Wappa (2 semillas), conocida como nuestra pequeña generadora de cogollos. Esta planta es la
versión automática de una de nuestras variedades feminizadas más populares, una versión más pequeña, más condensada, que sin
embargo posee un punch impresionante en todos los ámbitos. Es una planta genial para los primerizos y las primerizas, fácil de cultivar
y de rendimiento rápido. Los cogollos son macizos y llenos de resina, aportándoles un sabor dulce y afrutado y un colocón duradero
Índica/Sativa.
La segunda en este pack de colección de semillas de cannabis es Auto White Berry (2 semillas), la Pequeña Bella. Es una de nuestras
variedades autoflorecientes originales, cogimos la genética especial de la variedad original (la cual ha sido criada para ser una planta
exótica desde las flores hasta en su consumo) combinada con la genética Rudelaris. El resultado es una planta pequeña que es la viva
imagen de la sofisticación: desde sus colores púrpuras en la fase de floración, sus cogollos recubiertos de resina y su colocón
“complejo”, que puede acompañarte en tus tareas durante el día o ponerte a dormir al caer la noche.
La tercera, es Vertigo (2 semillas), conocida como el Botiquín, gracias a su gran potencial para aliviar el dolor a las usuarias y a los
usuarios médicos. Fue una variedad criada especialmente para este propósito – el efecto aporta un globo Índica relajante mientras que
el factor Sativa asegura un colocón de claridad mental. Vértigo crece bien en balcones, y en los alféizares de las ventanas de
apartamentos urbanos, y en pequeños jardines de la ciudad. También crecerá adecuadamente en interiores.